Talor Gooch, número 238 del ranking, es el jugador con más ganancias del curso. Jon Rahm, quinto en la lista.
El golf está llegando a su fin en 2023. De hecho, las temporadas del PGA Tour y del LIV Golf ya han finalizado y a la del DP World Tour apenas le queda un torneo en Sudáfrica antes de la gran final en Abu Dhabi la próxima semana. Es, por tanto, un buen momento para hacer balance de lo ocurrido en los últimos meses. La Ryder Cup se quedó en Europa tras una magnífica actuación del equipo del Viejo Continente, mientras que los cuatro Majors se los llevaron Jon Rahm (Masters de Augusta), Brooks Koepka (PGA Championship), Wyndham Clark (US Open) y Brian Harman (Open Británico).
Este deporte es uno de los que más dinero mueve entre sus jugadores y los premios son públicos. El póker de Majors tienen una bolsa de dinero de entre 15 y 20 millones de dólares. Además, hay otro buen puñado de torneos que reparten cantidades similares después de que el PGA Tour subiese los premios este año. Por encima de ellos se sitúa la gran final de los playoffs entre los 30 mejores golfistas de la temporada y que tiene hasta 75 millones de bonificación.
Es lógico pensar que los mejores jugadores del mundo sean los que más ganan a lo largo de un año ya que es habitual verles pelear por más títulos. Son los casos, por ejemplo, de Jon Rahm, Scottie Scheffler o Rory McIlroy, los tres mejores del circuito y que se encuentran entre los seis golfistas con más ganancias en 2023. Ahí también figuran Koepka y Hovland, que se impuso en los mencionados playoffs. Sin embargo, todos ellos han ganado menos dinero que Talor Gooch, número 238 del ranking. ¿Cómo es posible?
La respuesta es sencilla: el LIV Golf. El circuito surgido en Arabia Saudí y regado con cientos de millones de dinero árabe ha atraído a algunos de los jugadores más populares del PGA Tour, la mayoría ya en la recta final de sus carreras, a un pequeño puñado de estrellas actuales (Cameron Smith, el mencionado Koepka o Bryson DecChambeau) y a muchos golfistas con poco nombre pero que han visto engordadas sus cuentas corrientes que sería imposible compitiendo de tú a tú contra los mejores del planeta. Y ese es el caso de Gooch.