La revolución tecnológica de la robótica llega al mundo del golf, cambiando las prácticas de gestión actuales.
Se necesitarán nuevos KnowHow para el personal de los campos de golf y una mano de obra especializada para manejar esta tecnología e interpretar los datos.
El uso de drones se presenta como una herramienta complementaria para alcanzar nuevos retos. Esta tecnología proporciona datos precisos que ayudan a los profesionales de riego a implementar estrategias de manejo con objetivos específicos para reducir el consumo energético e hídrico.
Una innovadora propuestaque persigue el uso sostenible de los recursos y que permitirá tener una ayuda y un complemento en las labores de mantenimiento permitiendo optimizar el riego; mejorando la calidad del césped; detectando rápidamente problemas fitosanitarios, plagas o necesidades de abonado; permitiendo conocer el relieve, las curvas de nivel y las pendientes de las diferentes zonas del campo para hacer riegos selectivos y comprobando la edficacia de las medidas aplicadas.
En definitiva, todo ello contribuye a presentar un campo en mejores condiciones de juegopara el uso y disfrute de los socios, clientes, visitantes, etc.
Complementario a lo anterior, la tecnología dron utiliza sensores térmicos que permiten conocer el estado de vigorosidad del césped; la temperatura de la planta; el nivel de humedad del suelo y realizar un análisis de encharcamientos.
El análisis de estas imágenes junto a la radiación solar del día posibilita saber el índice de irrigación de cada zona del campo y observar las diferencias que aparecen en las zonas del campo.