Royal St. George’s, sede del Open 2021, en medio de la polémica de las damas socias de clubes en Gran Bretaña

Diez años después, Royal St. George’s vuelve a ser sede del cuarto y último ‘major’ del año. Para ello, debieron acabar con su prohibición de mujeres como socias.

FOTO: RoyalStGeorges-01

Es una polémica mundial. ¿Hay clubes que restringen las membresías a las mujeres? Sí, y algunos muy importantes. “Ha sucedido durante siglos: a los hombres les gusta reunirse con hombres de vez en cuando, y a las mujeres les gusta reunirse con mujeres de vez en cuando. Eso es solo un simple hecho de la vida en Estados Unidos», decía el ‘chairman’ de Augusta National, Hootie Johnson, en 2002. Diez años después, el nuevo presidente, Billy Payne, otorgó las primeras membresías a damas.

En 1988, las mejores mujeres ‘amateurs’ de Estados Unidos, Gran Bretaña e Irlanda llegaron a Royal St. George’s para la Curtis Cup. Fueron recibidas con un letrero que decía: “No Women, No Dogs in the Clubhouse”. No pasó de la molestia y la anécdota, pero en 2011, la última vez que se jugó allí el Open, la organización retiró el letrero y dio un ultimátum tácito al club, algo así como: “Si quieren ser la sede del Open en el futuro, deberán replantear su política de aceptación de socios y socias”.

En la rotación del Open, Royal St. George’s y Muirfield eran las únicas dos sedes que se negaban a aceptar mujeres entre sus socios. Luego del episodio del letrero, en 2014, los miembros activos de Royal St. George’s votaron a favor de la inclusión.

El asunto en Muirfield fue algo más pedregoso. En 2016 sometieron a comicios la decisión de aceptar mujeres dentro de la Honourable Company of Edinburgh Golfers, pero el resultado fue negativo, un hecho que repudió públicamente la R&A: “No podemos llevar nuestro gran evento a un lugar donde todavía se discrimine por razón de tu sexo”.

Tal pronunciamiento de la R&A movió los cimientos de Muirfield, que aspira a recibir el Open por decimosexta vez en su historia. Cuatro meses después de esa primera -y fallida- votación, sus socios recularon y terminaron aceptando la inclusión de mujeres en su masa societaria, 237 años después de su fundación.

Hace un par de semanas la noticia fue la apertura de Pine Valley a damas socias. Sin embargo, en Estados Unidos aún hay al menos 20 clubes de golf que se niegan a abrir sus puertas a las mujeres como, como Butler National, Bob O’Link y Old Elm and Black Sheep Golf Club, en Chicago; Preston Trail en Dallas; Lochinvar en Texas; Burning Tree en Maryland; Garden City en New York, y The Plantation en California.