Esto es uno de uno de los aspectos más importantes para tener un buen juego aunque es importante encontrar la técnica con la que cada uno se sienta más cómodo.
Recuerda sujetar el palo de manera firme, pero sin ejercer demasiada presión. Si lo sujetas demasiado fuerte, estarás tensionado y no conseguirás un buen golpe.
- Coloca la mano dominante en la varilla y levanta el palo. Para las personas diestras, la mano dominante es la derecha. Para las personas zurdas, la mano dominante es la izquierda.
- Coloca la mano no dominante en el grip, de forma que la empuñadura quede sobre la palma de la mano. Cierra entonces la mano para rodear el palo y bájalo. El dedo pulgar debe quedar paralelo al palo y señalando hacia abajo. Debes dejar un par de centímetros de separación entre la base del palo y la mano.
- Lleva la mano dominante hasta el grip, de forma que quede junto a la mano no dominante. El dedo meñique de la mano dominante debe quedar entre el dedo índice y el corazón de la mano no dominante. El pulgar también debe estar apuntando hacia abajo.